sábado, septiembre 27, 2008

Adiós, Paul Newman

Ayer por la noche dejaron de brillar los ojos azules más hermosos del espectáculo (en opinión de su servilleta), pertenecientes a toda una leyenda del cine: Paul Newman, que a sus 83 años perdió la batalla contra el cáncer de pulmón.
Esos prodigiosos ojazos, su carisma y elegancia inigualables, un matrimonio intachable al lado de la también actriz Joanne Woodward, sus obras de caridad y los más de 60 roles que personificó en casi medio siglo de carrera, hicieron de Paul Newman uno de los mitos más duraderos del cine y una pérdida muy sentida.

Conocí el trabajo de Paul Newman gracias a mi madre, que siempre lo admiró y decía que es su amor platónico, compartiendo con ella las películas Butch Cassidy and The Sundance Kid y El Golpe. Me impactó mucho su forma de actuar tan natural, ese magnetismo que lo caracterizaba y también me enamoré de sus ojos azules que con una mirada decían tantas cosas...

Desde entonces además de considerarlo un galán en toda la extensión de la palabra, me convertí en admiradora de su trabajo. Me gustó mucho en Cortina Rasgada de Hitchcock, me hizo reír como Butch Cassidy, me conmovió como Doc Hudson en Cars y prácticamente lo adoré como villano en su última aparición en la pantalla grande en Camino a la Perdición.

Además de actor, padre de familia y apasionado de las carreras, Paul Newman era un filántropo a quien le gustaba apoyar diferentes causas, lo que lo hacía mucho más humano y no el simple ídolo de cine.

Ayer que nos enteramos de su fallecimiento mi mamá y yo no pudimos evitar ponernos tristes y desear que su muerte haya sido sin sufrimientos y que su familia encuentre consuelo.

¡Descansa en paz, Paul Newman, te vamos a extrañar! ¡Hasta el próximo post!

2 comentarios:

Linda dijo...

Snifff...
También me llenó de tristeza...

the lines on my face dijo...

pues si, ni modo, así pasa, esperemos que su lucha no haya sido muy dolorosa ;)